Mi ex novia de 21 años, mi verga la recuerda aún

Hace una semana al estar buscando información del trabajo en memorias de hace años, me encuentro con fotos de una exnovia que recuerdo con mucho cariño y lujuria, ya que para mi es hermosa ,de buen cuerpo y además hacía realidad todas mis perversiones.

Poco a poco subiré de ella, ya que tengo mucho material, y si es bien recibido por ustedes, puede que me arriesgue a subirla sin censura.

Con esta chica Victoria duramos 8 meses, fuí el 2do en meterme a su cuerpo, la agarré seminueva, pero yo fuí el que le enseñó el verdadero placer y lujuria, lo rico de la suciedad y la perversión.

Recuerdo muy bien el día que después de ir al cinema terminamos en la casa , ella pegándome una de sus mamadas suavecitas y delicadas, en aquel entonces yo no era tan hardcore, así como solo me sentaba o acostaba a disfrutar, a sentir esa rica boca como recorría cada centímetro de mi verga mientras me veía con sus ojos color amielados, con cara de inocente pero comiendo pito.

Ese día por primera vez sintió lo que era ser una puta, u objeto usado para placer , ya que por primera vez se lo enterré en su muy apretado culo, aún antes de que su vagina lo probara, solo le dí una buena mamada de ano y enseguida se lo clavé.

Me sorprendió que no se opusiera, ya qur si bien en 2 ocasiones antes ya había sentido mi chorizo en el culo, nunca antes sin haberla estimulado y convencido mediante un buen palo vía vaginal; esta ocasión no fue relaciones sexuales de novios, fué revolcada de puta.

Turné desaparecerle la riata en el culo y en la vagina, de cucharita, de a perro y patas al hombro, unos minutos en su deliciosa vagina y otros en su sucio culo, hasta soltarle la leche.

Antes de perder la erección la puse sobre las rodillas y me oriné en su cara y boca, como perro marcando su territorio, siendo esta práctica común entre nosotros, casi siempre entre una cogida y otra me gustaba tirar mis deshechos sobre ella, ocasionalmente ella se orinaba sobre mi verga.

En la segunda metida de verga , fué de lo más normalizó, yo encima de ella con sus patas al hombro para terminar de tirar la leche en su bello rostro.

Me encantaba besarla así, llena de menos. Cosa que nunca haría con alguna de mis putas, a ellas después de la leche las escupo en la cara y les recuerdo lo zorra que son.