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Mi ano. Su historia

Mi Ano: Su historia. (Mezcla presente y pasado)
Hoy contaré la historia de mi ano/orto

Mi ano. Mírale. Mírale bien, si puedes. Es un agujero, con una historia detrás. Quiere desahogarse

Mi ano. Lo tengo hundido, casi sin pliegues, sin arrugas, sin estar ceñido, apretado, guiñado, arrugado.
No es un ano normal.
Un ano normal tendría pliegues, apretaría. El mío, no. Mi ano tiene una historia que contar.
Es una boca floja, siempre a medio cerrar, a veces ni eso, dejando escapar los gases cuando corro.
El músculo de dentro, el que va por libre, es inútil, no sirve para nada. No aprieta, no aguanta la contracción.
Parece más la entrada de un sexo femenino, un coño, y hasta eso se ve más más cerrado en 4 que lo mío, que esta rendija.
Cuando estoy a cuatro patas, siento un miedo brutal por mi ano, por lo que piense de él quien lo vea.
Me imagino sus miradas juzgando ese agujero sin ceñir que se expone, cediendo con una facilidad que me pone triste.

Intento apretar, mover ese músculo de fuera, el esfinter anal externo, el que supuestamente controlo a voluntad propia, pero es una contracción ridícula, un intento vano que se disipa al segundo, dejando ver su debilidad, su daño.
Mi ano me traiciona, sus músculos. Siento como tiende a dilatarse cuando estoy en cuatro, se rinde, entregándome al depredador.


La Bañera. (El vago recuerdo que me cambió el ano).
La bañera, donde todo empezó
La bañera de casa. Yo si3te años o quizá uno o dos menos, contra él tr3ce.

Recuerdo el agua caliente, el vapor que empañaba el aire, y mi cuerpo diminuto, mi inocente cuerpo encima del suyo. Tal vez solo fue un juego, tal vez me presté a él, no lo sé, es un recuerdo frágil.
En mi recuerdo no sé si hubo dolor, ni placer, solo la sensación de que mi cuerpo, mi tesoro, ya no era el mismo (aunque eso lo descubrí más tarde, años)

¿Que si me dejé viol4r o usar? Esa pregunta la tengo siempre en mi mente, junto a la imagen de mí encima de él.
Me pudre el alma, me hace sentir el culpable de mi propia desgracia. ¿Lo busqué? ¿Abrí las piernas? ¿Fue un juego que acepté?

La culpa me carcome por dentro, el hecho de que quizá acepté ese juego, me mata por dentro.
Me rompieron me destrozaron mi cola, mi agujero, es la prueba viva de que no fue un juego, no pudo ser un juego, quizá me hizo ponerme encima.

Un orificio sin pliegues, sin estar ceñido, sin arrugas, sin estar plano, la marca de por vida. pero que lo explica todo, me usaron, o tal vez me presté..

La adolescencia (Descubrimiento consciente de mi sexualidad)

La adolescencia, llegaron las hormonas revueltas y el porno(no lo descubrí yo).

Apareció un chico de 13 añ0s, que acabó "hundiendo" mi vida, nunca me fijé en él, aunque iba a mi colegio.
Una tarde en el parque hicimos amistad, nos veiamos en el cole y por las tardes o incluso noches.

Siempre solíamos ir al bosque, o al parque, o al cole a caminar o correr... etc.

Un día, sin más en el bosque, me preguntó si yo ya me masturbaba, o si veía porno yo no sabía qué era eso le dije, y me dijo, que mal, ven te enseñaré.

Estábamos en aquel bosque, escondidos del resto, pero a 5 minutos del pueblo a pie.
Fue ahí donde se acercó ami, se bajó su pantalón sus calzoncillos. Me dijo, dame tu mano, la puso en su pene y comencé a masturbarlo con sus instrucciones.
Lo sentí raro, algo duro, curvo, que latía, nunca había tocado algo así con mi mano.
Tras masturbarlo, a los pocos días, descubrí el porno por él.
Puso un vídeo donde una chica hacía sexo oral, y la verdad es yo desde que vi eso era como si un deseo de ser la chica aflorase en mí, un deseo que no manifesté, aunque no hizo falta. No tardó en pedirme que le hiciese lo que esa chica hacía, y así lo hice.

Tras las primeras mamadas-petes o como le llamen, en nada ya tendría su miembro insertado hasta la campanilla. Usábamos el porno como guía

Sentía la agonía, la falta de aire, pero no le pedía parar, intentaba seguir el ritmo de las chicas para sentirme ellas.
No llevo una cuenta, pero de seguro se la mamé al menos 30 veces o más ¿Era una máquina de complacer?, de mamar? su juguete?
Quizá sí, cuando lo pienso hoy diría que sí, era su juguete, y no lo sabía, o incluso me sentía bien haciendo esas cosas.

Un día todo cambió, puso un vídeo de una chica en una bañera, siendo penetrada por culo culo, ella encima del chico, y me quedé helado. Me quedé pensativo sin exteriorizar nada. "Esto lo viví yo" pensé al ver ese vídeo, de la chica en la bañera sentada encima de esa cosa.
Me dijo él, te pasa algo, no no tranquilo, es que... No me digas más, ya sé lo que pasa me dijo, en aquél bosque, donde tantas veces se la mamé.
Guardó el móvil, se acercó ami y sin palabras me bajó el pantalón, y empezó a tocar mi culo, a darle cachetadas, palparlo, agarrarlo, mientras me miraba, y estabamos frente a frente, yo recuerdo bien ese momento, no podía mirarlo a los ojos, no sé porqué, aunque no estuvimos mucho frente a frente, pues se puso tras de mi, y lentamente por la espalda me llevo al pino que había justo enfrente, a escasos metros.
Me dejó frente al pino, y me sugirió que me apoyase, y así lo hice, me sujeté a ese pino,
y sentí cómo sus manos agarraban mi cadera arqueando mi pelvis haciendo que expusiera mi culo, que aun seguía con ropa interior, sentí como ahora sus manos agarraban mi ropa interior, y la bajaban lentamente, hasta dejar mi culo al natural, el cual agarró, separó mis nalgas, supongo que para ver mi ano, y de un momento a otro sentí que sus manos soltaban mis nalgas, se acercó con sus calzones aún puestos y se empezó a rozar, yo notaba algo duro, algo que no tardé en notar directamente con ano, noté un dolor punzante, grité y rápidamente, me aparté, me dijo, ¿qué pasa?

Que me has hecho daño, eso pasa , ¿daño?, sí daño, nunca me hicieron eso antes? El qué? daño?. Nooo eso noo, lo otro. ¿metertela por ahí?, sí eso.
Comenzó a reir y me dijo, pero si a ti ya te han taladrado, ¿qué dices? Que ya te han roto el culo marica. A lo cual respondí diciendo que se acabó que no quería saber más de él, nos distanciamos y lo último que dijo cuando estaba por marcharme fue, qué dirían tus padres si te viesen, con 10 añ0s y el culo roto... ¡que te calles! grité, y me fui, cuando llegué a casa me puse a llorar en mi habitación, y una vez más venía ami el recuerdo de la bañera, yo encima del chico, no quise darle importancia, pero que me dijese el chico con el que acababa de estar, que yo ya tengo en culo roto, me hizo creer que lo de la bañera quizá pudo ser real, aún rápidamente pensé que solo lo dijo para molestarme y no le di importancia.

Todo lo que hicimos ¿Y para qué? Para que al final él corriese la voz de que yo era gay, cuando aún íbamos al colegio, y esos rumores me acompañaron 2 años después directo al instituto.
La amistad se fue al traste y el rumor, como la pólvora, por todo el pueblo Maricon, chupa pollas etc.
Esas palabras se pegaron a mí como una lapa incluso el instituto 2 años despues. Un clavo ardiendo en mi ano blando y ya sin forma.

instituto (tercera parte del relato)

Por desgracia entré ya al instituto con las etiquetas, maricón, culo roto, chupa pollas, etc
En el aula por suerte no solía ocurrir nada, pero en el patio o en deporte era un infierno, no tenía amigos, y no me gustaba ser el centro de atención, y menos por fama de tener el culo roto o chupar pollas...

Era un infierno, me intimidaban en los pasillos, me empujaban, se reían de mí, del pobre que no sabía ni defenderse.

Por suerte, al poco tiempo las chicas de clase empezaron a ser mi compañía, ya no estaba tan mal como estando solo, aunque me hacían bromas, o me tocaban el culo, pero no le daba importancia porque entre ellas también se hacían bromas.

Me hice buen amigo de una de ellas o eso pensaba al menos. Y un día en el estaba con ellas y hablando de todo, una de ellas dijo, ¿te podemos hacer una pregunta? aii no see, a ver... ¿Es verdad lo que dicen de tí? ¿qué exactamente?
ya sabes..., ¿eso de que te gustan los chicos, que eres por decirlo así suave el que hace de chica?... No sé lo veo muy íntimo y privado esa pregunta... por suerte mi amiga, me salvó y me dijo tranqui no tienes porqué respondes, yo por ejemplo soy bisexual, no hay nada de malo... Ya, pero es que no sé...

Cuando tenga mas confianza lo diré.., por suerte me salvó la campana, tocaba deporte y pues en el trayecto a deportes mi amiga me dijo al oído, ¿oye y no crees que sería mejor que dijeses si eres gay o no?, lo digo por tí, si lo eres y no lo aceptas nunca serás feliz, si lo dan ya por hecho, lo mejor es que lo asumas si lo eres, así todos acabarán olvidándose, ahora eres la novedad chiquillo.

Yo: Ya lo sé, pero hay un problema...
Ella: ¿cuál?
Yo: que si acepto lo que me dicen también estaría aceptando que mi culo está roto... Ella: chico eso no importa, y si te preocupa eso dile a tus padres que te lleven a un médico, así sales de dudas.
Yo: Ya, ¿pero que le digo a mamá?, oye mira mamá me llevas al médico, quiero saber si ano está mal, ¿te imaginas?.

Ella: Chiquillo yo he ido al ginecólogo y no ha pasado nada...

Yo: Es que tengo miedo, ojalá fuese tan fácil como mandar una foto a un médico o alguien con buen ojo y que diga, oye mira, tu ano esta bien, o tu ano está mal por esto o por lo otro, etc.
Ella: Chico, a ver, si tanto te preocupa yo he tenido sexo por el culo, también tengo primos gays, que conste que lo digo por si tanto interés tienes por salir de dudas.
Yo: Ya , ¿y qué hago voy con tus primos me pongo a 4 y le digo me miras el ano?
Ella: No tonto😅, si vas a casa de mis primos y te pones en 4 asume que no saldrás sin que te follen que oye, a lo mejor deberías probar quizá te guste, yo no sabía que era bisexual hasta que probé con una chica.
Yo: ¿Te puedo contar un secreto y que quede entre nostros?
Ella: Cuenta chiqui
Yo: Ya estuve con un chico, no hubo penetracion, no se logró
Ella: Ya, ya lo sabía, si se te nota..., osea quieres decir que lo intento y no entró?
Yo:Sí
Ella: ¿Pero entonces porque te preocupa tu ano si ni te entró?
Yo: Es difícil de contar... No pude porque me dolió, y me dijo que ya tenía el culo taladrado, que ya me lo habían roto...
Ella: aii chico que pena no te preocupes por eso, los chicos son así, para ellos cualquier culo está roto...
Yo: Ya, pero sabss, llevo años imágenes difusas en mi cabeza, y me preocupa que sean reales, Osea, yo con si3te añ0s o menos y en la bañera y encima de un chico de tr3ce.
Ella: ¿Te violaron y no dijiste nada?!!!!
Yo: No lo see, solo son imágenes en mi mente. Lo único que me hace pensar que pudo ocurrir de verdad es que el chico con el que estuve ano mi ano dijo que yo ya tenía el culo taladrado, roto.
Ella: Pues tienes varias opciones, si te viol4ron de verdad deberías ir al médico, si solo quieres saber si de verdad está roto, puedes ir con mis primos pero asume que habrá sexo... La otra opción es que una tarde quedmos o algun dia a en gimnasia discretamente vamos al baño y te observo, ami me han dado x el buyate y no he notado cambios... O si quieres mis primos pero el más joven tiene 21 y tu doc3 o tr3ce...
Finalmente me convenció... dije que si algún dia se daba oportunidad de ir a su casa se lo mostraría.
Un día nos mandaron un trabajo en parejas y me tocó con ella, me dejó mamá donde habiamos quedado.
Ella: Espero no te importe, no puedo llevar chicos a casa, hay que ir a casa de mi primo.
Yo:Está bien, vamos a hacer un trabajo no creo que pase nada..
Ella: Un trabajo y lo otro...
Yo:¿Que otro?
Ella: chico ya sabes, sobre tu culo... Dijiste que si alguna vez podíamos quedar me dejarías observar.
Yo: Ya pero tu me dijiste que si voy a casa de tu primo y me pongo en 4 me va a follar...
Ella: Tranquilo si él está con la consola no se entera, ademas que habría de malo, quizá hasta te guste.
Ella: Abre la puerta y y cuando nos dirigimos a la habitación sale su primo al aseo.
Yo: Me quedo mirando y me sonrojo, ella se fija él también.
Él: Prima quién es este chico tan mono?
Ella: Venimos a hacer un trabajo de clase.. nos vamos a la habitación.
Ella: aii chiquillo no se si gay o bi no sé si eres, pero mi primo te gusta.
Yo: tsss, calla tia que te va a oír...
Ella: Tranqui chiquillo vamos a hacer el trabajo antes
Pasaron dos horas y terminamos el trabajo y ella dijo, ya podemos ver tu asunto...🙄
Yo: Nose nose, ya me estoy arrepintiéndo... ¿Cómo me voy a poner en 4 para que me veas?, es una locura tia... además y si entra tu primo?
Ella: Vengaa si he visto que te los has comido con los ojos, y el a ti.. No me digas que no te gustaría que entre mi primo y te vea o incluso te fo.., y zas puerta abierta.
El: ¿Ver qué?
Ella: que quiere que le vean el ojete para saber si lo tiene dañado...
Yo: Tiiia pero porqué se lo dices??!!
Ella: Perdon chiquillo se me ha escapado.. pero qué más da si te gusta y tú a el, además 4 ojos ven mejor que dos
Él: ahh pero es cierto?? yo encantado pero si veo un culo joven en 4 delante mío no creo que pueda evitar follarlo...
Ella: Venga tranquilo chiquillo, si lo peor que puede pasar es que mi primo te folle y no creo que te disguste...
Yo: aii no see muy normal no es ir a casa de alguien que no conces y ponerte en 4 para que te vea el primo y la prima...
Él: Vengaa que lo estás deseando, estás deseando liberarte...
Yo: Está bien, me pongo en 4 me miráis.. pero nada más, y os salís antes, no puedo poner en 4 sabiendo que estáis aqui y viendo vuestras caras...
Se salieron y yo me puse en 4 con ropa y mirando a la pared para no ver a los primos, grité, ya está
Ella y él entraron, a lo que dijeron, y el pantalón?
Quitamelo tú, no me fió de que tu primo se exceda.
Ella: Me bajó el pantalón y dijo, ¿usas tanga?
Yo: Cómo tanga?
Ella: Pues que llevas tanga, no puedes venir a casa de mi primo en tanga ponerte en 4 y que no te de por culo... Encima con este culo blanquito sin pelos que te gastas
Yo: perdón no me acordaba que lo llevaba...
Ella: Me toca las nalgas y baja el tanga, dejando expuesto mi ano, uff, pues si está abierto, yo hago anal y no lo tengo así
Él: se acerca me pone cerca del borde de la cama, coge sus dedos, y dice, nunca vi uno como este es un ano bonito, pero abierto está, no tiene arrugas, y es como que el culo se abre solo.
Ella: La verdad que sí, hace un minuto no se veía así, lo tienes hundido. Yo creo que de verdad te usaron de niño, si ni mi primo vio un ano así...
Mi ano. Su historia

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