Tras una buena noche de trabajo en el bar, acabe con Jovanka, pasando un buen rato allí mismo tras acabar mi turno. Esta llevaba una camiseta color crema, semiajustada, marcando sus tetazas gordas, una corta minifalda, negra, ajustada y unas medias negras transparentes. Bailando, no pare de acariciar sus tetazas, cada dos por tres. Nos besábamos y también acariciaba su culo. Varias veces, acabe apoyándola contra una pared, para poder comerla las tetazas, tapadas por la camiseta y el sujetador. En esa posición, aprovechaba para subir una de sus piernas y acariciar sus muslos.
No paramos de zorrear y calentarnos toda la noche y cuando cerro el bar, nos quedamos allí dentro los dos. Apoyados contra la barra, seguimos besándonos. No paraba de disfrutar de sus tetazas con mis manos y con mi cara. Cuando se las comía, mis manos bajaban a su culo y muslos, pero rápido volvían a sus tetazas. Metí mis manos por dentro de su camiseta y seguí disfrutando de sus tetazas, mientras nos besábamos más apasionadamente.
Jovanka subió su camiseta, mostrándome sus tetazas, con el sujetador negro de aro. Agarro mi cabeza y la apretó contra su canalillo, el cual lamí y besé, mientras acariciaba su culo. Saqué sus tetazas del sujetador y se las volví a comer y acariciar, sin descanso. Sus gordos pezones estaban riquísimos y mi lengua no paro de jugar con ellos, mientras se ponían bien duros. Cuando estos estuvieron durísimos, la bajé la camiseta y se los seguí lamiendo y mordiendo, bien marcados en la camiseta. Jugué con mis pulgares en ellos, mientras volvíamos a besarnos.
Entre a la barra a coger una botella de agua. Volví a colocarme frente a Jovanka y abrí la botella de agua, mientras le decía que la notaba muy acalorada. Rocié toda el agua por su camiseta y sus tetazas se marcaron, mas aun en ellas, transparentándose sus gordos pezones. Volví a acariciar sus tetazas y devorarlas por encima de la camiseta. Sus gordos y marcados pezones eran muy fácilmente comibles, por lo que no pare de hacerlo un buen rato.
Jovanka se arrodillo, mientras yo me quitaba el pantalón. Comenzó a acariciar mis huevos, mientas yo golpeaba su cara con mi polla. Pase mi glande por sus gordos labios y también los golpee. Acabe metiendo mi polla en su boca, follándosela despacio, mientras esta crecía y se ponía bien dura dentro. Cuando estuvo durísima, subí la velocidad, follándola la boca fuerte y sin descanso. Jovanka tuvo una arcada y tuve que sacar la polla, golpeando su cara con ella, nuevamente, mientras se recuperaba. Cuando cogió aire de nuevo, la deje que ella llevara el ritmo de la mamada. Jovanka acabo metiendo mi polla entre sus tetazas, con la camiseta empapada y ajustadísima, y me hizo una cubana maravillosa, apretándolas y lamiendo mi glande.
La hice levantarse y volvimos a besarnos, mientras acariciaba sus tetazas. Cuando volví a meter mi cabeza entre sus tetazas, disfrutando de ellas, mis manos bajaron hasta su culo. Subí, fácilmente, su minifalda a la cintura y acaricié su culo, tapado por las medias. La gire y la apoye las tetazas contra la barra. Volví a acariciar su culo, mientras lo observaba, viendo cómo, debajo de las medias, llevaba un tanga negro. Me arrodillé y comencé a besar su culo, mientras lo seguía acariciando. Una de mis manos, se metió entre sus piernas, acariciando su tapado coño. Di varios mordiscos a ese culo ancho, además de algún que otro azote. Tire fuerte de las medias, hasta rompérselas y poder pasar mi lengua por el triángulo trasero del tanga, mientras acariciaba sus glúteos. Rompí más aun las medias, pudiendo meter mi mano por el roto y el tanga, comenzando a masturbarla. Yo besaba y mordía sus glúteos. Separe sus piernas, metí mi cara y bese su coño, tapado aun por el tanga. Mordí el tanga y lo estiré, varias veces, antes de apartarlo y besar su coño. Metí mi lengua dentro y comencé a comerla el coño. Mis manos acariciaban sus muslos y su culo. Jovanka se giró y me fue mas fácil, meter bien dentro mi lengua y moverlo rápido en su empapado coño. Mis manos subían de sus muslos a sus tetazas, acariciándolas y jugando con sus pezones tan marcados y transparentados en la camiseta. Jovanka acariciaba mi cabeza y la apretaba de vez en cuando contra su coño.
Esta tenia el coño ya a punto de caramelo y me levante. Nos besamos y acaricie sus tetazas, mientras ella agarro mi polla y me masturbo. Me puse un condón y la subí una de sus piernas. Pase mi polla por su coño, tapado por el tanga, y lo golpee. Aparte su tanga y metí mi polla, comenzando a follar suave. Nos besábamos apasionadamente y, cada poco, agachaba la cabeza para devorar sus tetazas con la camiseta puesta. Poco a poco fui subiendo la velocidad de las penetraciones y los mordiscos en sus tetazas eran más frecuentes. No pare de follar su coño hasta que Jovanka se corrió. Soltó un fuerte gemido y apretó bien fuerte mi cara contra sus tetazas, haciendo que hasta me costase respirar.
Gire, nuevamente a Jovanka, apoyando sus manos contra la barra. Aparte su tanga y metí mi polla en su culo. Se lo folle fuerte, mientras agarraba su cintura. Sus tetazas se movían para todos lados y, cada poco, no podía dejar de agarrárselas fuerte. Me apoye yo en la barra y Jovanka se apoyó contra mí, de espaldas, metiéndose aun mi polla en su culo. Mis manos agarraban fuerte sus tetazas y nos besábamos, mientras ella se movía sin parar, en círculos.
Jovanka se arrodillo, mientras se quitaba la camiseta. Me quito el condón y metió mi polla entre sus tetazas, haciéndome un cubanón. Sus tetazas hacían que mi polla desapareciera y ella subía sin parar la velocidad de la masturbación, mientras me miraba sonriendo. Aunque la avise que iba a correrme, Jovanka no paro, y acabe corriéndome en sus tetazas, manchando su cara, pues la primera corrida salió fuerte disparada. Jovanka acabo mamándome la polla, a fondo, limpiándomela bien.
Jovanka se fue al baño a limpiarse y yo prepare unas copas. Me senté en uno de los sofás a esperarla. Cuando salió del baño, vino hacia el sofá, con la minifalda bajada y las tetazas bien colocadas, dentro del sujetador. Se sentó a mi lado, la di su copa y brindamos. Tras unos tragos y algo de charla, volvimos a besarnos. Una de mi mano acariciaba las piernas de Jovanka y ella comenzó a masturbarme. Mi mano, acabo dentro de la minifalda, metiéndose por el roto de las medias y por el tanga, para también masturbarla. Mi cara bajo rápidamente a su enorme canalillo, comiéndoselo. Jovanka se quito el sujetador y volví a devorar sus tetazas, tan ricas con esos grandes pezones.
Jovanka se coloco a gatas y comenzó a hacerme un mamadón. Una de mis manos acariciaba su pelo y con la otra la subí la minifalda a la cintura y seguí masturbándola. Jovanka iba cambiando los ritmos de la mamada. De vez en cuando me comía los huevos, mientras me volvía a masturbar. También, varias veces, pasaba mi polla por sus tetazas y la metía entre ellas, haciéndome rápidas cubanas.
Jovanka me puso un condón y se sentó sobre mí. Se metió mi polla en su coño y se comenzó a mover en círculos, despacito. No me contuve a agarrar sus tetazas, apretándolas y comiéndoselas, sin descanso. Ella iba subiendo la velocidad de sus movimientos poco a poco, hasta moverse como una loca. Yo no podía dejar de comer sus tetazas y Jovanka seguía sin parar, variando la velocidad, con mi polla en su coño. Cuando se corrió, apretó mi cabeza contra sus tetazas. No paro de moverse y siguió moviéndose y cabalgando sin parar, hasta que fui yo el que me corrí. Entonces se volvió a poner a gatas en el sofá, me quito el condón y me limpio bien la polla.
Tras unos besos y caricias más, terminamos de tomarnos las copas, nos vestimos y nos fuimos cada uno a su casa.
No paramos de zorrear y calentarnos toda la noche y cuando cerro el bar, nos quedamos allí dentro los dos. Apoyados contra la barra, seguimos besándonos. No paraba de disfrutar de sus tetazas con mis manos y con mi cara. Cuando se las comía, mis manos bajaban a su culo y muslos, pero rápido volvían a sus tetazas. Metí mis manos por dentro de su camiseta y seguí disfrutando de sus tetazas, mientras nos besábamos más apasionadamente.
Jovanka subió su camiseta, mostrándome sus tetazas, con el sujetador negro de aro. Agarro mi cabeza y la apretó contra su canalillo, el cual lamí y besé, mientras acariciaba su culo. Saqué sus tetazas del sujetador y se las volví a comer y acariciar, sin descanso. Sus gordos pezones estaban riquísimos y mi lengua no paro de jugar con ellos, mientras se ponían bien duros. Cuando estos estuvieron durísimos, la bajé la camiseta y se los seguí lamiendo y mordiendo, bien marcados en la camiseta. Jugué con mis pulgares en ellos, mientras volvíamos a besarnos.
Entre a la barra a coger una botella de agua. Volví a colocarme frente a Jovanka y abrí la botella de agua, mientras le decía que la notaba muy acalorada. Rocié toda el agua por su camiseta y sus tetazas se marcaron, mas aun en ellas, transparentándose sus gordos pezones. Volví a acariciar sus tetazas y devorarlas por encima de la camiseta. Sus gordos y marcados pezones eran muy fácilmente comibles, por lo que no pare de hacerlo un buen rato.
Jovanka se arrodillo, mientras yo me quitaba el pantalón. Comenzó a acariciar mis huevos, mientas yo golpeaba su cara con mi polla. Pase mi glande por sus gordos labios y también los golpee. Acabe metiendo mi polla en su boca, follándosela despacio, mientras esta crecía y se ponía bien dura dentro. Cuando estuvo durísima, subí la velocidad, follándola la boca fuerte y sin descanso. Jovanka tuvo una arcada y tuve que sacar la polla, golpeando su cara con ella, nuevamente, mientras se recuperaba. Cuando cogió aire de nuevo, la deje que ella llevara el ritmo de la mamada. Jovanka acabo metiendo mi polla entre sus tetazas, con la camiseta empapada y ajustadísima, y me hizo una cubana maravillosa, apretándolas y lamiendo mi glande.
La hice levantarse y volvimos a besarnos, mientras acariciaba sus tetazas. Cuando volví a meter mi cabeza entre sus tetazas, disfrutando de ellas, mis manos bajaron hasta su culo. Subí, fácilmente, su minifalda a la cintura y acaricié su culo, tapado por las medias. La gire y la apoye las tetazas contra la barra. Volví a acariciar su culo, mientras lo observaba, viendo cómo, debajo de las medias, llevaba un tanga negro. Me arrodillé y comencé a besar su culo, mientras lo seguía acariciando. Una de mis manos, se metió entre sus piernas, acariciando su tapado coño. Di varios mordiscos a ese culo ancho, además de algún que otro azote. Tire fuerte de las medias, hasta rompérselas y poder pasar mi lengua por el triángulo trasero del tanga, mientras acariciaba sus glúteos. Rompí más aun las medias, pudiendo meter mi mano por el roto y el tanga, comenzando a masturbarla. Yo besaba y mordía sus glúteos. Separe sus piernas, metí mi cara y bese su coño, tapado aun por el tanga. Mordí el tanga y lo estiré, varias veces, antes de apartarlo y besar su coño. Metí mi lengua dentro y comencé a comerla el coño. Mis manos acariciaban sus muslos y su culo. Jovanka se giró y me fue mas fácil, meter bien dentro mi lengua y moverlo rápido en su empapado coño. Mis manos subían de sus muslos a sus tetazas, acariciándolas y jugando con sus pezones tan marcados y transparentados en la camiseta. Jovanka acariciaba mi cabeza y la apretaba de vez en cuando contra su coño.
Esta tenia el coño ya a punto de caramelo y me levante. Nos besamos y acaricie sus tetazas, mientras ella agarro mi polla y me masturbo. Me puse un condón y la subí una de sus piernas. Pase mi polla por su coño, tapado por el tanga, y lo golpee. Aparte su tanga y metí mi polla, comenzando a follar suave. Nos besábamos apasionadamente y, cada poco, agachaba la cabeza para devorar sus tetazas con la camiseta puesta. Poco a poco fui subiendo la velocidad de las penetraciones y los mordiscos en sus tetazas eran más frecuentes. No pare de follar su coño hasta que Jovanka se corrió. Soltó un fuerte gemido y apretó bien fuerte mi cara contra sus tetazas, haciendo que hasta me costase respirar.
Gire, nuevamente a Jovanka, apoyando sus manos contra la barra. Aparte su tanga y metí mi polla en su culo. Se lo folle fuerte, mientras agarraba su cintura. Sus tetazas se movían para todos lados y, cada poco, no podía dejar de agarrárselas fuerte. Me apoye yo en la barra y Jovanka se apoyó contra mí, de espaldas, metiéndose aun mi polla en su culo. Mis manos agarraban fuerte sus tetazas y nos besábamos, mientras ella se movía sin parar, en círculos.
Jovanka se arrodillo, mientras se quitaba la camiseta. Me quito el condón y metió mi polla entre sus tetazas, haciéndome un cubanón. Sus tetazas hacían que mi polla desapareciera y ella subía sin parar la velocidad de la masturbación, mientras me miraba sonriendo. Aunque la avise que iba a correrme, Jovanka no paro, y acabe corriéndome en sus tetazas, manchando su cara, pues la primera corrida salió fuerte disparada. Jovanka acabo mamándome la polla, a fondo, limpiándomela bien.
Jovanka se fue al baño a limpiarse y yo prepare unas copas. Me senté en uno de los sofás a esperarla. Cuando salió del baño, vino hacia el sofá, con la minifalda bajada y las tetazas bien colocadas, dentro del sujetador. Se sentó a mi lado, la di su copa y brindamos. Tras unos tragos y algo de charla, volvimos a besarnos. Una de mi mano acariciaba las piernas de Jovanka y ella comenzó a masturbarme. Mi mano, acabo dentro de la minifalda, metiéndose por el roto de las medias y por el tanga, para también masturbarla. Mi cara bajo rápidamente a su enorme canalillo, comiéndoselo. Jovanka se quito el sujetador y volví a devorar sus tetazas, tan ricas con esos grandes pezones.
Jovanka se coloco a gatas y comenzó a hacerme un mamadón. Una de mis manos acariciaba su pelo y con la otra la subí la minifalda a la cintura y seguí masturbándola. Jovanka iba cambiando los ritmos de la mamada. De vez en cuando me comía los huevos, mientras me volvía a masturbar. También, varias veces, pasaba mi polla por sus tetazas y la metía entre ellas, haciéndome rápidas cubanas.
Jovanka me puso un condón y se sentó sobre mí. Se metió mi polla en su coño y se comenzó a mover en círculos, despacito. No me contuve a agarrar sus tetazas, apretándolas y comiéndoselas, sin descanso. Ella iba subiendo la velocidad de sus movimientos poco a poco, hasta moverse como una loca. Yo no podía dejar de comer sus tetazas y Jovanka seguía sin parar, variando la velocidad, con mi polla en su coño. Cuando se corrió, apretó mi cabeza contra sus tetazas. No paro de moverse y siguió moviéndose y cabalgando sin parar, hasta que fui yo el que me corrí. Entonces se volvió a poner a gatas en el sofá, me quito el condón y me limpio bien la polla.
Tras unos besos y caricias más, terminamos de tomarnos las copas, nos vestimos y nos fuimos cada uno a su casa.
1 comentarios - Las tetazas de Jovanka siempre ayudan a pasarlo bien